Cumbres Borrascosas

Él es el gran pensamiento de mi vida.
Si todo lo demás pereciera y él se salvara, yo seguiría existiendo;
y si todo lo demás viviera y él se aniquilara,
el universo sería para mí un mundo extraño;
yo no me sentiría parte de él.
Él está siempre, siempre, en mi pensamiento, no como cosa agradable, de igual manera que yo no soy siempre agradable para mí misma, sino como mi propio ser.

viernes, 14 de agosto de 2009




Frágil.
Así te siento cuando te veo sobre nuestra cama.

Inmaculado, como la nieve intacta sobre la cima de una montaña.

Angelical. Tierno. Pequeño. Sensible. Tranquilo. Intocable.


Pero, sobretodo, frágil.


Y no puedo evitar sentir la necesidad de protegerte con mis brazos,

con mi cuerpo, mi alma, mi corazón..


Porque siento que si algo te ocurriese,

tu dolor sería mi dolor,

tu sufrimiento mi sufrimiento,

y tu tristeza, mi tristeza...

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